Si quieres diferenciarte tienes que ser diferente, ¿evidente, no?
Ser diferente para diferenciarte es casi imprescindible hoy en un mercado tan saturado de empresas que “hacen lo mismo y venden lo mismo”.
Ser diferente para diferenciarte debe ser el ADN de tu empresa para que cuando tu potencial cliente tenga que elegir, esa elección sea tu empresa.
Ser diferente para diferenciarte es una cuestión de valentía empresarial, es romper reglas, tener la disrupción por bandera y no importarte ser el primero en cambiar dentro de un sector.
Ser diferente para diferenciarte es ser proactivo, tomar el mando de tu nave empresarial, abrir nuevas rutas en el camino del éxito empresarial.
Ser diferente para diferenciarte es tomar riesgo con una actitud que producirá resultados que quizá no son los que esperas, pero si quieres diferenciarte tienes que ser diferente.
Si quieres diferenciarte y ser diferente no puedes estar a camino entre lo intuitivo y lo operativo donde las empresas producen y venden relativamente lo que el mercado masivo le demandan, no aspirando a diferenciarse realmente del resto de los competidores.
Piénsalo, eres un jugador en un juego de competición empresarial, para competir «en igualdad de condiciones» todo el mundo tendría que tener un enfoque no estratégico, pero en el momento en el que uno de los jugadores tenga un enfoque estratégico del juego tú, tenlo claro, si no lo tienes, perderás. Ese competidor se diferenciará porque es diferente.
En España el 99,8% de las empresas son pymes y la mayoría no tienen en cuenta suficientemente lo importante que es la estrategia empresarial y su aplicación práctica. Al final, la estrategia es lo que se hace y, por lo tanto, «todas las empresas tienen una estrategia», porque cuando no se tiene estrategia, esa es precisamente la estrategia y ese es su problema, la estrategia de la no estrategia.
Por lo tanto, para destacar de tu competencia y que el mercado rápidamente te reconozca como una empresa distinta, tienes que apostar por la diferenciación estratégica y esto te beneficiará con resultados notablemente superiores a los del resto de los competidores de tu sector.
¿EL CIRCO DEL SOL? ¿Lo reconoces con respecto a sus competidores? Se diferencia porque es diferente…
Es uno de los mejores ejemplos por todos conocidos, hace una propuesta de valor diferencial al mercado. EL CIRCO DEL SOL apostó por eliminar los animales en el circo y por hacer una apuesta atrevida en un sector tan tradicional con una propuesta original, ejecución excelente y conexión emocional con el cliente. EL CIRCO DEL SOL es mezcla arte, danza, teatro y elementos del propio circo, cada año se renuevan saliendo de su zona de confort para estar permanentemente asombrando y dejar al público sin aliento.
La propuesta de valor de EL CIRCO DEL SOL es arriesgada porque ser excepcional y diferente, esto se traduce en una presión alta y nada fácil de llevar y gestionar, es un continuo reto pero es una empresa viva, renovada, actual, dinámica, proactiva y con el cambio en su ADN.
Si quieres diferenciarte, tienes que ser diferente…
José Ángel Morales Medrano
Socio-Fundador